En el caso de la pancita, el platillo de la familia Ricardo cuenta con una casta de tres generaciones en el estado.
El olor de la pancita saliendo del envoltorio de la hoja de maguey se mezcla junto a los humos del comal que de a poco pone en su punto la masa de las gorditas. Son dos comercios distintos, con la tradición culinaria de Tepatepec con lazo de hermandad.Watch movie online Logan (2017)
En el caso de la pancita, el platillo de la familia Ricardo cuenta con una casta de tres generaciones. Su color rojo y envoltorio confundirían al poco experimentado gourmet con barbacoa, pero no, es pancita estilo Tepa.
“La pancita de res es una receta tradicional de Tepa, tenemos 35 años preparándola y vendiéndola, la cual es un símbolo de nuestro pueblo, pues nos distinguimos de otros estados no lo hay. Mi abuelo, Antonio Ricardo Pérez empieza con este gran platillo”, platicó José Antonio, la tercera generación de los cocineros.
Toño contó que la receta ha traspasado fronteras no sólo de los estados, sino del país. Querétaro, Puebla, Tlaxcala y próximamente Morelos son algunas de las entidades que ha visitado esta pancita, cuya característica principal es la de ser seca y servirse como relleno de una gordita.
“Lo que conlleva ir por la carne al rastro, se llega al matadero, se lava, más o menos la preparación, lo que es el lavado, en lo que se entierra, que son dos horas, y ahí se tiene que dejar alrededor de 10 horas pues es una carne muy gruesa, se tiene que dejar más tiempo que la barbacoa de borrego”, explicó el heredero de la receta de la pancita Ricardo.
Como parte de una familia que lleva la cocina en las venas, Toño aseguró que les ha ido bien en estas últimas tres décadas, con un producto, sus gorditas rellenas de pancita, que actualmente vale 15 pesos.
“Nos ha ido bastante bien, las generaciones que han estado aquí, mi hermano, mi tío de cierta forma su estado económico es aceptable, se han mantenido bastante bien de este oficio”, comentó.
Incluso, reta a quien se atreva a romper el récord de más comelón: 18 gorditas. “Si rompen el récord la comida es gratos, estamos en la plaza 31 de mayo”, dijo.
Pero la familia Ricardo no es la única en tener como modo de vida la venta de comida, también está la señora Berta Olvera, quien lleva dos décadas en el negocio.
Doña Berta explica que tiene dos hijos, a quienes mantiene por la venta de sus gorditas de pancita, sopes y quesadillas, aunque el negocio no pasa por sus mejores momentos.
“Ahorita están bajas las ventas, porque cerraron el libramiento, pero de ahí en fuera sí sale”.
Su trabajo es diario, excepto los lunes que descansa, el cual comienza desde muy temprano para tener lista la comida, tarea a la cual dedica varias horas de la madrugada, eso sin incluir la inversión económica.
“Le invertimos unos mil 500 pesos diarios, y estamos sacando en venta depende, pues no es un negocio fijo a veces apenas vendemos los mil 500, es decir lo que compramos para la venta y algo para nosotras comer, pero otras veces sacamos mucho más”.
La señora Olvera es madre soltera de dos hijos, y el mayor está a punto de entrar a la universidad, con el propósito de estudiar administración de empresas.
La pansita de res en barbacoa es un platillo original de progreso de Obregón , el señor Don Toño conocido en tepa ya finado , papa del también finado de apodo ñeris. Trabajo en su tiempo de infancia como matancero con la señora Isaura también finada conocida como doña chawa,quien tenía una carnicería en el mercado de progreso y le entregaba sus menudos al difunto don Lalo, quien ya llevaba años elaborando la pancita de res en barbacoa , Fue entonces donde don Toño copia la idea al señor Lalo , deja de trabajar para doña chawa y se va a tepa a vender también pansita , y la familia Ricardo lo sabe pero se quieren adjudicar la invención del platillo. Un platillo que es originario de progreso de Obregón Hgo . Y en especial del señor Eduardo Sánchez conocido como don Lalo.